Familia
La primera vez que fui a un billar tenía siete años. Eran las doce de la noche y a mí me emocionaba hasta límites insospechados saber que mis padres estaban dormidos en
Santa Claus de las Ratas
Compartimos en el reino de la mugre las migajas de una esperanza rancia; una esperanza que ya no calienta ni las patas, mucho menos el corazón.
La Princesa Danae
Mira un campo de flores, velo más de cerca, ¿lo ves? Ahora observa cómo miles de flores abren sus alas y vuelan; una de ellas soy yo, me llamo Danae.
Pan de Muerto
El joven interno se preparaba para hacer la ronda matutina intrahospitalaria. Con taza de café en mano, se acerco hacia el mostrador donde se encontraban las enfermeras en turno y los expedientes
Anécdotas de María Guadaña
Eduviges y Eusebio llevaban años sin dirigirse la palabra. Con la mirada perdida, sin hacer ruido alguno; no con el rostro perplejo, la otra con calma. De vez en cuando se mueven
Orfandad
Piel. Todo el espacio es piel. Oscura y densa. Dentro de esta piel hay una escalera. Una escalera sin dirección que se extiende hacia la nada. No tiene barandilla ni descansos. Es
Ignominiam
Estoy acostado en la cama con la mirada perdida en el techo carcomido por la humedad y el paso de los años. De cuando en cuando se me viene un recuerdo, cierro
