Encarnar lo caótico: una charla con Juan Cirerol

Una de las peores cosas que existen en la vida es acallar a otra persona. El ser humano tiene una voz con la cual puede expresarse y con la cual también al hacerlo, comete errores, pero esto último no debería ser motivo para acallarlo permanentemente. En Juguete Rabioso estamos conscientes de ello, siendo un medio en el cual damos espacio a todas las voces, pues todas tienen algo que decir. Es de esta manera como Yahir Hernandez, una de las plumas jóvenes mas sobresalientes del periodismo musical de su generación se encuentra con el músico de Mexicali: Juan Cirerol, el cual se encuentra en plena reinvención de su carrera.

Tony Spinilla

Éste no es un texto sobre perdón: no se aborda ni se pretende invocar. Tampoco es un texto para justificarse: en quién se centra cometió un error y lo que sigue no intentará aducir eso.

Éste es un texto sobre un tipo que, de tener una posición artística privilegiada – entendiendo como privilegio el tener una solvencia-gestión externa para poder ir de tour, tocar en grandes festivales y grabar discos -, decidió romper con eso, volver a casa, emitir comentarios insensibles ante una situación trágica, enfurecerá miles, pedir perdón, alejarse del ámbito público, buscar ayuda y, apenas hace unos meses, volver a los reflectores – escenarios y redes sociales–para continuar con aquello que disfruta.

Es un texto sobre alguien que ha transitado una vida peculiar y por ende ha encarnado – encarna – lo caótico: Juan Cirerol.

I

Solo Juan sabe por qué hizo lo que hizo. Aunque después emitió una disculpa pública al comprender su error – en un vídeo de Youtube que ya no está disponible -, ese fatídico 19 de septiembre de 2017 a las 14:58 horas, momento que tenía sus dedos sobre las teclas enunciado que “Debería darme tristeza el sismo del DF pero no”, solo él tenía noción de las ideas que le taladraban la cabeza.

Actualmente, un año después de ese suceso, Cirerol se siente “totalmente bien. Totalmente agradecido con mis fans por el apoyo todo este tiempo”.

Después del incidente, el cantante originario de Mexicali, orillado por los comentarios iracundos en redes sociales y las peticiones para bajar su música de plataformas como Spotify, se auto exilió casi medio año; sus apariciones musicales ocurrieron esporádica mente en cumpleaños  y otros eventos de índole privada. A la par, aprendió serigrafía y reconectó con su familia después de años ensimismado en los escenarios.

Para nadie era desconocido que él enfrentaba problemas relacionados con las adicciones, por eso otra de las cosas que hizo fue “internarme en un tratamiento de rehabilitación durante unos meses”.

“He aprendido a no darle demasiada importancia a las cosas materiales y en cambio ser una mejor persona, ser un mejor amigo, un mejor tío, hijo, un mejor artista.  Creo en la paz, el amor, la música, la justicia, la caridad, la ecología, la empatía, en ser positivo y en Dios”, es la reflexión que actualmente guía al compositor e interprete que suscita reminiscencias a Johnny Cash y Chalino Sánchez.

Para esta continuación de su carrera, que ya lo llevó a ciudades como Guadalajara y Monterrey, Cirerol tiene “muchas sorpresas” en cuanto a lo discográfico. También sigue escribiendo poemas y un diario.

Tiene objetivos más estables, por eso, para relajarse, hace sonar a Los Tres, a Charly García, a Gary Stewart y a Los Plebes del Rancho. O se pone a leer Sopa de pollo para el alma y las memorias de Geoff Emerick.

Pero, ¿cuál es el reto más grande al que se enfrentará en los meses venideros?

“Ganarme un público que me escuche en Estados Unidos y seguir en México con el cariño de las personas”.

II

Ante cada concepto expresar lo primero que se venga a la cabeza, es la dinámica que Juan sigue a continuación:

Industria musical

Mon Laferte tiene mejores piernas que yo, que ella se quede con eso.

Ser políticamente correcto

No es necesario

Empoderamiento femenino

¿Te refieres a Mon Laferte? Si es así, pienso que es genial

Medios de comunicación

A wastedmoney

Vicios

¿Vice en español?

Guitarra

Mi confidente.

III

“Yo tengo 31 pero no me miro como chavo ruco (no es indirecta para nadie, solo es la verdad). Aun así, necesito una bicicleta más aerodinámica y comenzar a escribir para ganar un Grammy.

Sé que nadie me dará ideas serias en este espacio, o solo habrá comentarios muy rebuscados. Necesito ir a Pepe’s Office aunque ahí puro escritor sobrio, que se respeta, pero yo soy como el Camarón de la Isla. Necesito al menos un alcoholito para sacar lo que llevo dentro. De todos modos no admiro a nadie en la escena musical. Sí respeto. Y Caloncho es guapo y buen músico pero, de ahí para arriba, no hay nadie, solo estoy yo.

Luego algún hombre con barba cerrada (de moda) con una selfie en su perfil que dice ´Soy perfecto porque soy feliz´, de pronto me dirá: ´¿Eres bueno para decir pendejadas, no?´. Y yo no puedo agredirle.

Fucking Steve Jobs…”.

Un manifiesto en Facebook del creador del Corrido Chicalor que data del 13 de septiembre de 2018.

IV

Desde hace un par de semanas, Juan ha tenido mucha actividad en redes sociales, principalmente en Facebook: no deja de compartir eventos y de vez en cuando sube vídeos tocando alguna canción.

Resaltan un par:

El espíritu de Dios está en este lugar (publicado el pasado 14 de septiembre)

El espíritu de Dios está en este lugar

el espíritu de Dios se mueve en este lugar

está aquí para consolar

está aquí para liberar

está aquí para guiar

el espíritu de Dios está aquí.

 

Muévete en mí, muévete en mí

toma mi mente y mi corazón

llena mi vida de tu amor

muévete en mí, Dios espíritu, muévete en  mí.

 

Y El corrido de López Obrador(20 de septiembre):

Año del 2018 presente en nuestras mentes

finalmente ha llegado nuestro nuevo presidente

que con gran autoridad vino a México a salvar.

Por todo el país se siente la alegría de la gente

porque López Obrador las encuestas arrasó

porque todo el país se puso rápido a su favor. 

Yo le mando mis respetos y toda mi admiración

ese viejo tiene agallas para hablarle la nación

y para darle la mano al pueblo trabajador. 

Ya con esta me despido, me tengo que retirar

ahora sí politiquitos no se la van a acabar

que llegó Andrés Manuel que por bien va a gobernar.

 

Estos vídeos hacen pensar que el cambio de perspectivas del que habla Juan va en serio. Que después de encarnar lo caótico, Cirerol busca reinventarse dentro de la tranquilidad: “En mis últimas canciones abordo temas de optimismo, de historias de mi vida actuales en las que me alejo de las anfetaminas. Quiero hacer canciones que los niños y adultos puedan cantar juntos”.

Aunque en su setlist siguen apareciendo temas como Metanfeta y Clonazepam Blues.

 Pero afirma que el hecho de subir al escenario, colocar la guitarra en el pecho, afincar la plumilla en su mano derecha y empezar a embestir las cuerdas es lo que lo “motiva para salir adelante y evolucionar como persona”.Por eso, pese a todo, Juan Cirerol continúa tocando.

Links:

Último disco “Soy rancherito soy fronterizo”

Corrido de López Obrador