Merodeador

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Debajo de la cama murmullos,

detrás de las cortinas unas botas se asoman,

dentro del closet brillan un par de ojos rojos,

siluetas duchándose en la cortina del baño.

Silbido repetitivo con armonía aguda,

pasos arrastrados y respiración entrecortada,

susurros nocturnos difíciles de descifrar,

nos ven los intrusos por la ventana.

Llaman a la puerta tres veces seguidas,

rasguños en la madera húmeda,

pezuñas afiladas raspando,

mirilla inútil, no se aprecia nada.

Alguien pasea

y se golpea a sí mismo en el jardín,

camina en círculos,

tiene hambre de carne humana.

Padres nuestros ignorados,

no son la oración correcta,

nueve, uno, uno,

cortaron la línea  telefónica,

una piedra entra agresiva por la ventana.

Una nota amarrada con lazo,

huele a estiércol de vaca,

definitivamente es estiércol de vaca

con letra mal hecha y temblorosa:

“no corran!,

no sirve de nada,

estoy en todos lados”.

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Texto por Juan.José Rodríguez Favila A.K.A Ppmuerte

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