Los Chijuas

[vc_row][vc_column][vc_column_text]

Hay momentos en los que uno no sabe qué escribir. Puedes estar dándole vueltas a las cosas y no aparece nada claro en el panorama.  En ocasiones, solo hay que empezar a soltar algo para agarrar el hilo,  y otras veces,  el planteamiento puede venir de cualquier lado, de la manera más… ¿fortuita?

Saliendo de mi casa  por la mañana, a pocos pasos me encontré una palabra escrita sobre el pavimento, que me lo dijo todo y que hasta la fecha no he logrado saber qué significa.  La palabra era “chijuas”, escrito en chapopote. ¡Cómo el grupo! Ese grupo de pop psicodélico, que en los sesenta sacó un disco homónimo tan bueno. De regreso a mi casa me puse a escucharlos  y recordé que ese primer álbum cumplía precisamente ¡cincuenta años! de haber sido publicado.

Cada año hay discos que celebrar, y creo que son pocos los discos hechos en México con tal cantidad de años. Por eso, hoy quisiera recordar a este gran grupo que lanzó ese álbum fenomenal en 1968 y que fácilmente podría entrar en algún recuento de grandes álbumes del rock mexicano.

[/vc_column_text][vc_empty_space height=”40″][vc_single_image image=”11789″ img_size=”full”][vc_empty_space height=”40″][vc_column_text]

Si algo tenían los Chijuas es que su sonido garagero, de fuerte influencia psicodélica, aterrizaba en canciones de perfecta manufactura pop, con buenos arreglos y melodías. Aunque no estaban exentos de lanzar covers, como cualquier grupo de la época, lograban impregnarle su sello característico, y es ahí donde canciones tan notables como  Iloveyou, de TheZombies, o Mighty Quinn, tuvieran un brillo propio, logrando hacerlas suyas e incluso,  por momentos, haciendo que sonaran mejor bajo el filtro de su estilo. Sus composiciones propias brillaban igualmente, lo que demostraba de qué estaban hechos. Ahí quedan composiciones tan buenas como Están cambiando los colores de la vida  o Qué bonito es.

Diversas circunstancias hicieron que la banda no tuviera la fama de otras agrupaciones de la época. Con el tiempo, optaron por un sonido más suave, diluyéndose un poco aquello que los hacía tan geniales. Aun así, resulta importante rescatar del olvido ese primer disco tan redondo y disfrutable. Háganse el favor de escucharlos. No los defraudarán.

Hasta el momento, sólo hay algo que me sigue intrigando… ¿Qué diablos significa “Chijuas”?

[/vc_column_text][vc_empty_space height=”30px”][vc_column_text]

(Edición de textos: Cecilia Olaciregui Ruíz)

[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]