Ideas culeras: Breve biografía de (mi) ciudad

Ideas culeras: Breve biografía de (mi) ciudad

[vc_row][vc_column][vc_column_text]

De parte del staff de Juguete Rabioso le damos nuestras más sinceras disculpas al autor Yair Hernández por los inconvenientes que se pudieron causar.

[/vc_column_text][vc_empty_space][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

Para hablar de mi primero tengo que hablar de mi ciudad, una donde la única esperanza es morir por causas naturales antes de que alguien te mate. Donde la gente mira al cielo no para apreciar nubes sino para evitar gotas. Una ciudad que es varias ciudades que se confronta a diario. La dividen camellones bajos que separan riqueza de miseria.

Aquí convergen todas las religiones del mundo pero nadie se tiene fe a sí mismo. Aquí miles bloquean calles pero pocos siembran árboles. Aquí una bala perdida siempre llega a un objetivo. La gente sube al transporte público de pésimo humor y baja de peor. Y hay quien se queja del aumento de la pobreza porque repudia alfamélico moribundo que pide limosna. En esta metrópoli es más fácil compartir una buena acción a través de redes sociales que salir a la calle con una bolsa de croquetas para repartir a los animales.

[/vc_column_text][vc_empty_space height=”40″][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/2″][vc_empty_space height=”40px”][vc_column_text]

Las banquetas están llenas de mierdas y las bolsas de armas. Al día se dicen más “chinga tu madre” que “por favor” y “gracias”. Aquí te enamoras en una noche y sufres toda la vida. Esta es la ciudad de los vendedores ambulantes y de los hedores. De la prostituta que escucha canciones de Charlie Parker. Del fotógrafo-nota-roja que ve la muerte como salario.  De la joven lisérgica que vende su cavidad por más sustancia.  Del viejo ciego que usa un micrófono y su poco talento para generarle dinero a alguien más en el metro. De la señora que justifica su despotismo con su edad. Del adolescente que pide respeto en Twitter mientras orina un portón. Del niño que llora porque no tiene el Halo más reciente. Del adulto que, pese a llevar bastón, cede el asiento.

[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=”1/2″][qodef_single_image enable_image_shadow=”no” image=”12649″ image_size=”full”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_empty_space][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/2″][qodef_single_image enable_image_shadow=”no” image=”12650″ image_size=”full”][/vc_column][vc_column width=”1/2″][vc_empty_space height=”10″][qodef_single_image enable_image_shadow=”no” image=”12651″ image_size=”full”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_empty_space][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

Lo de “ciudad de los palacios” es un espejismo, esta es la ciudad de los extremos. Hay quienes pasan más tiempo al día en su carro que jugando con sus hijos.  Hay quienes se encuentran una cartera repleta y la regresan. Hay quienes se encuentran a una anciana decrepita y la despojan. Parece que el guion de todofue escrito porHarmony Korine. Luego ves casas de fachada similar que pueden ser tan dispares porque una tiene horno en el patio y la otra estufa eléctrica. Aquí los moteles reciben más amantes que matrimonios. Aquí el verdadero logro del artista es no morir de hambre. Aquí la playa es el plan del verano y el pavo el del invierno.

[/vc_column_text][vc_column_text]Hay gente que nunca ha salido de la ciudad, que nunca la dejará. Que su cosmos son cuatro paredes, el nuevo supermercado y otros pocos metros cuadrados. Que cuando les hablas del aire limpio piensan de inmediato en tanques de oxígeno. Que cuando mueran pasaran a ser parte de un panteón donde años después se instalará un Oxxo.

[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_empty_space][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/2″][/vc_column][vc_column width=”1/2″][vc_video link=”https://youtu.be/5ipGhzrIi3s”][/vc_column][/vc_row]

SHARE
sobre el autor

Yair Hernández

Yair Hernández Cárdenas (Ciudad de México, 1994) es estudiante de la escuela de periodismo Carlos Septién García. Colabora en Nexos, Noisey (VICE) y Yaconic. Fue gestor del colectivo musical Aquí No Hubo Escena.

Deja una respuesta