Pantone 51
Te me fuiste en un mal trazo al salir de la regadera.
en las estampas furiosas
en hombros extraños
en la colilla,
en el cubierto,
en el vaso,
en el deseo.
Al exhumar tu imagen
arrebolada contra el espejo
en un lánguido
-Te dejo la cuenta, cariño-
con ínfulas de haber sido escrito.
en un arranque de soberbia.
Resbalaste entre mis labios,
entre el pesado tacto
que te tomó por lanzallamas.
¿Qué me queda?
Tu carmín,
-Pantone 51-
entre las venas.